El Xoloitzcuintle - Canis lupus familiaris es una de las razas más antiguas del continente americano y una de las más raras del mundo. Esta raza se distingue por su falta de pelaje, aunque algunos ejemplares pueden presentar pequeñas manchas de pelo en la cabeza y la cola. Su apariencia es elegante y musculosa, y su piel es suave y cálida al tacto, lo que contribuye a su distintivo aspecto.
Estos perros son conocidos por ser leales, inteligentes y cariñosos con sus dueños, pero tienden a ser reservados con los extraños, se adapta bien a la vida en familia.
Son animales muy activos que requieren ejercicio regular para mantenerse en buena forma física y mental. Debido a su falta de pelo, los Xoloitzcuintles necesitan protección especial contra el frío y la exposición al sol, ya que su piel es susceptible a problemas dermatológicos, como irritaciones y quemaduras solares.
Según la Federación Canófila Internacional (FCI), el Xoloitzcuintle, también conocido simplemente como Xolo, se presenta en dos variedades: sin pelo y con pelo, conforme al estándar de la FCI: el Xoloitzcuintle es un perro de tamaño mediano a pequeño, con estructura corporal robusta, fuerte, y bien proporcionada. Su apariencia es elegante y su movimiento es rápido, ágil, y atlético.
Tiene una profunda conexión con la cultura mexicana, en la que era considerado un perro sagrado. En la antigua civilización azteca, se creía que estos perros tenían propiedades curativas, y su presencia en el hogar se asociaba con la protección contra los espíritus malignos. Además, se pensaba que el Xoloitzcuintle acompañaba a su dueño en la muerte, guiándole a través del Mictlán, el inframundo azteca, asegurando su paso seguro hacia la otra vida.
El Xoloitzcuintle se encuentra principalmente en México, aunque su popularidad ha crecido y ahora se encuentra en otros países. Prefiere climas cálidos y tropicales.
El Xoloitzcuintle estuvo en peligro de extinción en el siglo XX, pero gracias a los esfuerzos de criadores y entusiastas de la raza, su población ha aumentado y se considera estable en la actualidad.
Aunque es una raza resistente en general, el Xoloitzcuintle es propenso a enfermedades de la piel debido a su falta de pelo, incluyendo dermatitis, infecciones cutáneas y alergias. Estos problemas pueden manejarse con cuidados adecuados, como el uso de ropa protectora y la aplicación de bloqueador solar en días soleados.
Este extraordinario animal es una raza única que combina una rica historia cultural con características físicas y necesidades específicas, lo que lo convierte en un tesoro viviente de México y del mundo.
MVZ ESPECIALISTA ELSA DIÉGUEZ B.
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