¡Especie que habita en tierras mexicanas!
Las hormigas de bellota, cuyo nombre científico es: Formica perpilosa, viven en la ciudad y han evolucionado durante generaciones para resistir el aumento de más de un grado de la temperatura ambiental, debido al cambio climático de 46 a 47,7 grados centígrados.
Según estudios realizados por la Universidad Case Western Reserve de Ohio, “la evolución ofrece un importante amortiguador”, que es indispensable para las adaptaciones animales al cambiante clima.
Este fenómeno se conoce como microevolución y se debe a la selección natural, por lo que las hormigas que nacen con una mayor tolerancia al calor tienen más probabilidades de sobrevivir y reproducirse en un entorno urbano más cálido, transmitiendo sus genes a las siguientes generaciones.
Este proceso esta influenciado por:
Variación Genética: Las hormigas, como todos los organismos vivos, presentan variaciones en sus genes. Algunas de estas variaciones pueden afectar la capacidad de las hormigas para tolerar el calor.
Selección natural: En un entorno urbano más cálido, las hormigas con mayor tolerancia al calor tienen más probabilidades de sobrevivir y reproducirse, al igual que sus crías.
Las adaptaciones que las hormigas han realizado para soportar altas temperaturas son:
PELAJE AISLANTE
COLORACIÓN OBSCURA
GLÁNDULAS SUDORÍPARAS EN PATAS
MAYOR ACTIVIDAD NOCTURNA
La microevolución es un proceso que ocurre en todas las poblaciones de organismos vivos. De hecho, se ha documentado en una amplia variedad de especies, incluyendo bacterias, insectos, plantas y animales.
MVZ ESPECIALISTA ELSA DIÉGUEZ B.
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