El chotacabras cuellirojo (Caprimulgus ruficollis) es un ave migratoria que realiza un viaje épico de más de 3.000 kilómetros desde la Península Ibérica y el Magreb hasta África occidental. Durante esta travesía, se enfrenta a un reto inesperado: las hormigas legionarias del género Dorylus. Estas hormigas africanas, conocidas por su agresividad y comportamiento feroz en grupo, atacan al chotacabras cuellirojo mientras este descansa en el suelo. En algunos casos, estos ataques resultan en la amputación de uno o varios dedos de las aves.
A pesar de este desafortunado encuentro, el chotacabras cuellirojo demuestra una notable capacidad de adaptación y resistencia. Continúa su viaje migratorio, incluso con dedos amputados, impulsado por su instinto de supervivencia y la necesidad de reproducirse en sus áreas de origen. La interacción entre el chotacabras cuellirojo y las hormigas legionarias pone de relieve la complejidad y los desafíos que enfrentan las aves migratorias durante sus viajes. Es un recordatorio de las múltiples amenazas que estas aves enfrentan en su búsqueda de un hábitat adecuado para sobrevivir y prosperar.
El chotacabras cuellirojo es un ave nocturna y crepuscular. Es solitaria y solo se une a su pareja durante la temporada de reproducción. No construye nidos, sino que pone sus huevos en el suelo, en una depresión poco profunda. Prefiere zonas abiertas o semiáridas, como matorrales, bosques abiertos, pastizales, zonas agrícolas y áreas pedregosas o arenosas, donde puede excavar madrigueras para anidar. Es un insectívoro estricto y su dieta se compone principalmente de insectos nocturnos, como polillas, escarabajos, mosquitos y libélulas. La hembra incuba los huevos durante unos 18 días y los polluelos nacen nidífugos, es decir, son capaces de caminar y alimentarse por sí mismos desde el nacimiento.
El chotacabras cuellirojo es un ave de tamaño mediano, con una longitud corporal de 22 a 26 cm y una envergadura de alas de 52 a 58 cm. Los adultos pueden pesar entre 68 y 80 gramos. Su plumaje es principalmente de tonos grises y marrones, con motas y barras negras que le dan un aspecto de camuflaje. Tiene una mancha rojiza en el cuello, de ahí su nombre común. El pico es corto y negro, adaptado para capturar insectos en vuelo. Los ojos son grandes y negros, lo que le permite una buena visión nocturna. Las patas son cortas y delgadas, no aptas para caminar largas distancias. La cola es larga y puntiaguda, con plumas marrones y blancas.
El chotacabras cuellirojo es un ave migratoria que se reproduce en la Península Ibérica y el Magreb septentrional, y pasa el invierno en África occidental. En la Península Ibérica, se encuentra principalmente en zonas abiertas y semiáridas, como matorrales, bosques abiertos, pastizales y zonas agrícolas. Prefiere áreas con suelos arenosos o pedregosos, donde puede excavar madrigueras para anidar.
Como insectívoro, el chotacabras cuellirojo juega un papel importante en el control de las poblaciones de insectos nocturnos, como polillas, mosquitos y escarabajos. También es una fuente de alimento para depredadores como búhos, halcones y serpientes. El chotacabras cuellirojo está clasificado como Preocupación menor (LC) por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Sin embargo, sus poblaciones están disminuyendo en algunas áreas debido a la pérdida de hábitat, la fragmentación del hábitat y el uso de pesticidas. Es importante proteger el hábitat del chotacabras cuellirojo y evitar el uso de pesticidas nocivos para los insectos.
INVESTIGACIÓN MVZ ESPECIALISTA Elsa Diéguez B.
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