En medio del devastador conflicto entre Hamás e Israel, la Franja de Gaza enfrenta una crisis humanitaria alarmante. La Representante Especial para Palestina de UNICEF, Lucia Elmi, ha alertado que un millón de niños necesitan con urgencia protección y ayuda humanitaria en esta región. La escasez de suministros esenciales ha atrapado a los residentes locales, especialmente a los niños, en situaciones de angustia y sufrimiento.
El cruce de Rafah, ubicado al sur de Gaza y limítrofe con Egipto, se ha convertido en la única conexión vital para la entrada de ayuda humanitaria. A pesar de un bloqueo de dos semanas, el pasado sábado 20 de octubre, 20 camiones cargados con ayuda médica proporcionada por instituciones egipcias finalmente llegaron a Gaza. Sin embargo, esta ayuda, aunque valiosa, es insuficiente para cubrir las necesidades básicas de la población asediada.
Elmi ha enfatizado la importancia de un alto el fuego inmediato para facilitar la entrega sostenible de ayuda humanitaria a los afectados. Según el Ministerio de Salud en Gaza, más de 4,385 palestinos han perdido la vida y alrededor de 13,560 han resultado heridos desde el inicio del conflicto. Además, aproximadamente el 60% de la población de Gaza, alrededor de 1.6 millones de personas, han sido desplazadas debido a los ataques continuos de Israel.
La comunidad internacional debe unirse para aumentar los esfuerzos humanitarios y garantizar la protección de los niños y los civiles inocentes en Gaza. Es imperativo que se facilite el acceso sin restricciones para la entrega de ayuda esencial y se establezca un alto el fuego duradero para poner fin a este ciclo de sufrimiento y desesperación en la región.
Por Rodrigo Contreras de la Garza
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